La Virgen De Los Sicarios - Fernando Vallejo (Apuntes)

La Virgen De Los Sicarios - Fernando Vallejo (Apuntes)

¡Cómo andan de desactualizados los noticieros! Y es que una ley del mundo seguirá siendo: la muerte viaja siempre más rápido que la información. (Pag. 5)

Cuando la humanidad se sienta en sus culos ante un televisor a ver veintidós adultos infantiles dándole patadas a un balón no hay esperanzas. Dan grima, dan lástima, dan ganas de darle a la humanidad una patada en el culo y despeñarla por el rodadero de la eternidad, y que desocupen la tierra y no vuelvan más. (Pag. 7)

La humanidad necesita para vivir mitos y mentiras. Si uno ve la verdad escueta se pega un tiro. (Pag. 7)

Le expliqué, en serio, que por cuanto a la fisiología se refería, las únicas dos con que me había acostado sí, sí me habían gustado, pero que ahí acababa la cosa pues más allá no había nada porque para mí las mujeres era como si no tuvieran alma. Un coco vacío. Y que por eso con ellas era imposible el amor. (Pag. 10)

¿La solución para acabar con la juventud delincuente? Exterminen la niñez. (pAG. 16)

Cuando hay un cinco –digamos seis– con nueve ceros a la derecha, uno es un cero a la izquierda. (Pag. 24)

Somos una pesadilla de Dios, que es loco. (Pag. 24)

En eso consiste su enamoramiento: en lo contrario. Cualquier sociólogo chambón de esos que andan por ahí analizando en las "consejerías para la paz", concluiría de esto que al desquiciamiento de una sociedad se sigue el del idioma. ¡Qué va! Es que el idioma es así, de por sí ya es loco (Pag. 35)

Todo político o burócrata (que son lo mismo, puesteros) es por naturaleza malvado, y haga lo que haga, diga lo que diga no tiene justificación. Jamás presumas de éstos su inocencia. Eso es candor. (Pag. 39)

El eco del eco del eco... Muchísimo antes de que el eco se extinguiera el guardián de la tumba se desplomó. Luego el eco murió en sus armónicos. El Ángel Ex-terminador se había convertido en el Ángel del Silencio. (Pag. 46)

Claro que Dios existe, por todas partes encuentro signos de su maldad. (Pag. 47)

Sólo Dios sabrá, él que es culpable de estas infamias: Él, con mayúscula, con la mayúscula que se suele usar para el Ser más monstruoso y cobarde, que mata y atropella por mano ajena, por la mano del hombre, su juguete, su sicario. (Pag. 49)

Dios no existe y si existe es la gran gonorrea. (Pag. 50)

Ni en Sodoma ni en Gomorra ni en Medellín ni en Colombia hay inocentes; aquí todo el que existe es culpable, y si se reproduce más. Los pobres producen más pobres y la miseria más miseria, y mientras más miseria más asesinos, y mientras más asesinos más muertos. Ésta es la ley de Medellín, que regirá en adelante para el planeta tierra. Tomen nota. (Pag. 53)

Mensaje al presi-dente y al gobierno: El Estado debe concientizarse más y comprarles ropa a los muchachos con el fin de que ya no piensen tanto en procrear ni en matar. Las canchas de fútbol no bastan. (Pag. 64)

Bendito seas Satanás que a falta de Dios, que no se ocupa, viniste a endere-zar los entuertos de este mundo. (Pag. 64)