Una de las mayores indignaciones que se sufre es la de sentir que alguien se apropia de nuestro esfuerzo. Y eso se magnifica cuando un gobierno abre la jeta diciendo que ayudó a cada deportista a ser el mejor y en realidad lo único que hizo fue negarle posibilidades. Nos indignamos porque sentimos que la mentira es una mierda y que no se merece nadie que le usurpen su trabajo, que cada persona ha trabajado constantemente su camino y que es injusto que otros se apropien de triunfos ajenos. Ahora, ¿Han notado que ese mismo esquema lo tiene el patriotismo y sus derivados llevados a los deportes, regionalismos y otros ámbitos? algunos como fanáticos, otros como hinchas de conveniencia... nos tratamos de identificar con algo, pero en realidad realmente nunca lo trabajamos. Y así es como todo el mundo sale a proclamar victorias que no son de ellos y dicen que Colombia está siendo representada, pero cuando una mujer roba en china, piden que nadie juzgue a un país completo por una sola persona.