Quisiera ser un escorpión y poder clavar mi destrucción sobre los demás, o ser un toro y con ira arrancar de mí todo este vacío. Quisiera ser un carnero e ir escalando los peldaños de mi vida, o tener un gemelo interno que cargara con esta desesperación. Quisiera poder medir con equilibrio a la gente o revolucionar todo mi rededor. Quisiera ser sabio como el unicornio o un arquero entrenado para crecer espiritualmente, ser tan servicial como una virgen o ir de lado al lado como el cangrejo...
Pero solo soy un pececito en el océano, y aunque agradezco el poder curar rápidamente bajo el agua, sigo sintiéndome un pececito en medio de todo un universo...